El primer recuerdo que tengo de los postres
domingueros por excelencia son las lionesas de nata o por lo menos era lo único
que se podían permitir en mi familia y ya era todo un “lujazo”.
Después aparecieron por la mesa los brazos de
gitano, els “tortells” de nata y las tartas de crema y fruta pero ya no lo
recuerdo con tanto cariño.
Estudiabas con atención la bandejita de cartón
con su blonda blanca, las hileras de lionesas esperando que en el reparto te
tocara esa más gordita y llena de nata que parecía la mas apetitosa!...
Así pues, directo del baúl de los recuerdos,
la socorrida receta del clásico más clásico:
PASTA CHOUX
INGREDIENTES
(en tazas y cucharas americanas)
1
Taza de harina todo uso
¼ Teaspon de sal
1 Taza de agua
113 Grs. de mantequilla sin sal
4 Ud. huevos XL
PROCESO
-
Precalentamos el horno a 200º
-
Mezclamos en un bol la harina y la
sal
-
Poner el agua y la mantequilla
cortada en daditos en una olla
-
Llevar a ebullición y verter toda
la harina de un golpe
-
Remover unos segundos vigorosamente
y retirar del fuego
-
Seguir removiendo por un minuto
mas hasta obtener una pasta homogénea
-
Dejar templar unos minutos (2’ o
3’)
-
A partir de este paso puedes
continuar con la amasadora
-
Incorporar los huevos uno cada
vez, no incorporar el siguiente hasta que el anterior este completamente
integrado
-
Llenar una manga pastelera con una
boquilla rizada (mediana) y formar conchas (no las juntes mucho pues doblaran
su tamaño)(si te salen picos puedes aplanarlos con un pincel mojado en agua)
-
Hornear 15’ a 200º
-
Una vez fuera del horno esperar a
que se enfríen, cortar por la mitad sin terminar de separar las dos partes
-
Rellenar con nata, trufa, crema y
espolvorear con azúcar glass
* Una vez formadas
las conchas en la bandeja puedes congelarlas sin hornearlas para terminarlas en
cualquier ocasión.
Para utilizarlas
sólo tienes que descongelarlas y seguir con el proceso
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